Conscientes de la fuerza del color y el efecto positivo que ejerce sobre el estado de ánimo de las personas este puede ser estimulante, relajante, desafiante y curioso. El color puede cambiar la forma en el que vemos nuestro entorno, asegura la decoradora Roxana Justiniano, a modo de preámbulo sobre los tonos que mandarán el próximo año.
Perfecta combinación. Tenemos una infinidad de opciones para cambiar nuestras paredes con darles un simple toque de color, aunque juega un papel importante la creatividad, explica Justiniano. Para ello se pueden utilizar los empapelados, fotomurales, vinilos decorativos, cabeceros que son para el frente de la cama, los florales, infantiles, murales temáticos y los personalizados.
Según la personalidad. La tendencia es darle un toque de color neutro a nuestro frente principal en cualquiera de los ambientes. Hoy en día los colores y estilos son todos permitidos, sin embargo, juega un papel importante el gusto y la personalidad de quien habita cada lugar, agrega la decoradora.
Rojo, naranja y blanco. Al haber ganado terreno el estilo minimalista, Justiniano recomienda jugar con colores cálidos como el rojo o el naranja en una sola pared y combinar con detalles de vinil para darle un toque especial. El blanco seguirá siendo el color preferido este próximo año, siempre y cuando vaya combinado con empapelados, vinil, murales o texturadas.
Tonos cálidos
El rojo festivo, serio, dinámico y perfecto para un pequeño acento en la pared, que permite abrir nuestras mentes a nuevas ideas.
Vinilos decorativos
Para espacios vacíos que provocan una sensación de indiferencia un vinilo decorativo puede lograr un realce y aportan vida.
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