martes, 21 de enero de 2020

DISFRUTAR DEL SOL CON DOBLE PROTECCIÓN.

Tomar sol suele relacionarse con la buena salud y la actividad física, pero un exceso de exposición puede generar molestias y enfermedades en la piel, como quemaduras solares, pigmentaciones, arrugas y lo más peligroso de todo, cáncer de piel.

Por eso es recomendable tomar medidas de prevención y utilizar un bloqueador solar de calidad como Solaris, diseñado para ofrecer un mayor espectro de protección, previniendo los daños en la piel. Su moderna y eficaz formulación brinda resguardo contra las radiaciones solares, manteniendo la piel protegida e hidratada.

Prevención


Según la Doctora Ángela Madrid, especialista en dermatología, se debe evitar la exposición prolongada al sol desde las 10 hasta las 3 de la tarde. “También recomiendo otro tipo de cuidados, como ser ropa cubierta, mejor si es oscura, porque de esa manera no penetran tanto los rayos ultravioleta, y el uso de bloqueadores solares, que generalmente deben utilizarse cada dos horas”, indicó.

Hay diferentes tipos de bloqueadores solares para cada tipo de piel. En palabras de la Dra. Madrid, “Normalmente, un bloqueador que tenga un factor de protección solar a partir de 30 SPF es ideal, ya que esto tiene una cobertura del 96%, siempre y cuando sea utilizado cada dos horas”.

Solaris, un aliado para tu piel


Gracias a sus principios activos micronizados, que permiten una mayor absorción, los bloqueadores solares de la marca SOLARIS ofrecen doble protección (hasta la segunda capa de la piel) de los rayos UVB y UVA. Así mismo, se trata de un producto no graso, que hidrata y suaviza la piel, disminuyendo la irritación causada por el sol y evitando el envejecimiento debido a sus propiedades antioxidantes.

Aplicación


Diseñados para el uso en exteriores, los bloqueadores SOLARIS vienen en varias presentaciones, que incluyen SPF 30+FACIAL, SOLAR SPF 50+, SPORT 50+ y BABY & KIDS 50+. Para mejores resultados, se aplica en cara y cuerpo limpios, 20 minutos antes de la exposición al sol. Según las indicaciones de la Dra. Madrid, dermatóloga, debe aplicarse de nuevo después de dos horas o luego de un baño prolongado.

Los bloqueadores solares SOLARIS se encuentran disponibles en las farmacias y supermercados de Bolivia




lunes, 20 de enero de 2020

Tratamientos rejuvenecedores: ¿Bótox, ácido hialurónico o mesoterapia?



Según la percepción de los especialistas, todavía existe mucho desconocimiento sobre estos tratamientos rejuvenecedores e, incluso, se relacionan con uno solo, el del bótox (nombre comercial y popular de la toxina botulínica) que la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) considera un medicamento seguro, empleado desde hace más de veinte años en muchas especialidades médicas.

“La gran mayoría de la gente no diferencia unos tratamientos rejuvenecedores de otros y por eso es necesario que les expliquemos cuál es el más adecuado para lo que cada persona requiere”, apunta la doctora Concepción Valdés, coordinadora clínica de la Unidad de Medicina Estética de la Policlínica Barcelona.

Aquellas personas que desean someterse a tratamientos rejuvenecedores se preocupan, entre otras cosas, por los posibles efectos secundarios (que no presentan, excepto “algún moradito” a consecuencia del pinchazo, afirma la doctora) o tienen como referencia algún personaje famoso al que suelen poner como ejemplo para no caer en excesos.

“La gente de la calle busca la naturalidad, hacerse algo sin que parezca que te lo has hecho. Por eso hay que hacer el tratamiento correctamente y sin abusar. Hay que llevar los años bien llevados, pero no aparentar veinte menos, es antinatural”, afirma la doctora.

La toxina botulínica, el ácido hialurónico y la mesoterapia son tratamientos con resultados inmediatos que pueden aplicarse de forma individual o combinada bajo la supervisión de un médico titulado y especialista.

Si se aplican de forma simultánea pueden optimizar resultados y alargar los efectos en el tiempo, que suele ser de entre 6 y 12 meses ya que se absorben de manera paulatina, explica la doctora.

Aunque comparten algunos aspectos, cada tratamiento tiene una finalidad muy definida.



DIFERENCIAS ENTRE LOS TRATAMIENTOS REJUVENECEDORES


Bótox o toxina botulínica

Este producto relaja los músculos de forma temporal, hecho que hace disminuir las arrugas al reducir los movimientos marcados en las líneas de expresión y evitando que la piel se dañe más y que la profundidad de la arruga aumente.

Está dirigido a aquellas personas que empiezan a notar la aparición de líneas finas en su rostro, a partir de los 35 años, y a aquellas que quieran corregir arrugas en el entrecejo, la frente y el contorno de los ojos como las patas de gallo.

“Si se hace con mesura, este tratamiento queda muy natural. Si nos pasamos aparece un rostro sin expresión, que le cuesta hasta reír”, señala la especialista.

La duración de la toxina botulínica, en la primera aplicación, es de seis u ocho meses, pero se puede alargar hasta un año si se realiza un mantenimiento.

Ácido hialurónico

El ácido hialurónico es una molécula que se encuentra en el organismo de forma permanente y natural y se encarga de hidratar y mantener tersa la piel. El ácido hialurónico retiene el líquido bajo la dermis, para, desde el interior, tensarla y mantenerla luminosa. A partir de los 25 años esta molécula empieza a disminuir, hecho que provoca la deshidratación y aparición de arrugas en la piel. Por ello, se utiliza con el fin de devolver el aspecto original y juvenil de la piel.

Al inyectarlo, se rellenan las arrugas y se devuelve la concentración de ácido hialurónico inicial. Este tratamiento está especialmente recomendado para el tercio inferior de la cara y es altamente eficaz en el relleno de los pómulos, surcos nasogenianos y arrugas alrededor de los labios.

Además, es muy eficaz en el relleno de los labios para aumentarlos, el realzamiento de los pómulos, la corrección de pequeños huecos en el mentón e, incluso, para mejorar el aspecto de cuello, escote y manos.

“Es de relleno, por eso hay que controlar la cantidad para evitar caras exageradas, pero se reabsorbe en el peor de los casos, indica la doctora.


Mesoterapia facial


La mesoterapia facial es un tratamiento que consiste en infiltraciones de ácido hialurónico con vitaminas, que proporcionan un rejuvenecimiento que retrasa la aparición de arrugas y líneas de expresión. Este tratamiento se recomienda a partir de los 35 años de edad para obtener un aspecto más sano y vital de la piel de cara, cuello, escote y manos.

La combinación de estos tres tratamientos rejuvenecedores puede ser muy recomendable en algunos casos en que las arrugas estén muy marcadas o concentradas.

En estos casos, los músculos relajados con toxina botulínica permiten que las infiltraciones de ácido hialurónico duren más tiempo y tenga un efecto más visible. Además, permite eliminar pequeñas líneas de expresión que tras la aplicación del bótox aún quedan visibles, permitiendo mejorar los resultados finales. /

miércoles, 15 de enero de 2020

Delineado blanco, la tendencia retorna

El uso del delineador blanco en maquillaje es un tanto temido, sin embargo, puede resultar muy interesante y más bien se puede crear efectos impactantes en los ojos. Solo es cuestión de saber dónde aplicarlo para no obtener resultados indeseados.

Los profesionales saben de la versatilidad de este color en el maquillaje y es que cumple tanto la función de sombra, como la de delineador otorgando en ambos casos una mirada más luminosa y despierta, además ayuda a agrandar los ojos pequeños, separa los ojos juntos e incluso destaca su color.

Este año las propuestas son mucho más arriesgadas y glamurosas. Se trata de una transformación del clásico uso del eyeliner dándole un twist de modernidad gracias a la aplicación del color blanco.

Te mostramos algunas tendencias en boga.


Si el blanco no te queda del todo bien, puedes probar con el blanco perlado, el plateado, el dorado o el champagne.






martes, 14 de enero de 2020

Mucho ojo con la lipoescultura



Nos presentó fotocopia que lo acredita como cirujano plástico y como titular para ejercer operaciones de cirugía”, dijo al periódico El Día el abogado defensor de Natalia Céspedes, la modelo cochabambina de 26 años que falleció hace 13 días, tras someterse a una lipoescultura.

“No es suficiente”, afirma a mía Darío Suárez, miembro de la Sociedad Boliviana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva (SBCPER), pues para realizar una lipoescultura un médico debe capacitarse durante al menos otros seis años adicionales. Por eso, “el paciente está en todo su derecho de llamar delante del doctor a la SBCPER y verificar si es miembro”.

Céspedes había sucumbido ante un “combo” que se ofrecía por internet: implantes mamarios y lipoescultura de abdomen por $us 2.500 dólares, cuando este procedimiento suele costar más de $us 5.000. Además, según cuenta el periódico Opinión, las pacientes acordaban un “pacto de silencio”, que las condicionaba a no contarles de la cirugía a sus familiares. Por esto, la modelo solo les dijo que iba a viajar por trabajo.

La lipoescultura es un procedimiento quirúrgico diferente a la liposucción. “En ambos casos se aspira grasa de diferentes secciones del cuerpo, solo que cuando es retirada y vuelta a usar para fines estéticos o reconstructivos ya estamos hablando de una lipoescultura”, afirma Suárez.

La lipoescultura no es una cirugía para bajar de peso (a pesar de que el paciente baje kilos y tallas), añade su colega Javier Cossio, quien atiende en Santa Cruz.

El médico pedirá exámenes, como una evaluación cardiológica preoperatoria y una historia clínica. La buena salud psicológica también es imprescindible. La psicóloga Tatiana Jaúregui aconseja una terapia antes, para saber si realmente lo has analizado y si eres lo suficientemente madura para aceptar las consecuencias de este procedimiento.

Además, advierte con la obsesión por las cirugías. En estos casos, “esa persona ya necesita ser diferente a los demás, quiere pasar por la calle y que todos digan: ‘mira, ella es así’, quiere llamar la atención. Esto pasa porque no adquirió un concepto firme de su autoimagen”.

Esta situación se genera en la familia, durante la infancia, observa la especialista. Los padres pueden ayudar a crear una autoestima sana si se le aclara a la niña lo bonita que es sin necesidad de querer lucir como otra.

Jaúregui también previene sobre el dejarse llevar por la moda. “Si el busto grande está de moda y ella se hace un aumento guiada por esto, pues mal, porque la moda cambia, puede que mañana esté de moda que el busto sea pequeño.

Una vez que el paciente demuestre ser apto para someterse a este proceso podrá ser operado bajo anestesia general o local, dependiendo del volumen de grasa a extraer.

La lipoescultura consiste en la “inserción subcutánea de microcánulas (agujas de metal para aspirar grasa) de entre 3 mm y 4 mm de diámetro que serán empleadas para remover la grasa (normalmente ubicada en zonas como cintura, cadera, brazos, abdomen, piernas y papada)”, explica Cossio.

Y como en toda cirugía, hay riesgo de “infecciones… tromboembolismos (embolias que se producen por tapar alguna arteria, lo cual no deja que la sangre llegue al corazón). Usualmente cometen este error los médicos que no son expertos en el ámbito. También puede haber embolia grasa (cuando una célula de grasa se introduce en un vaso y produce un taponamiento)”, advierte Suárez.

Otro riesgo es la perforación de intestinos, porque la lipoescultura es un procedimiento que se hace ‘a ciegas’ y se realiza simplemente con la palpación”, añade Suárez. Céspedes falleció porque durante su operación le perforaron una arteria renal.

Por eso, antes de realizarte este procedimiento, recuerda llamar a la SBCPER, pedirle toda la información a tu médico, acudir al psicólogo y, por favor, no ahorres. Tu salud es lo primero.

Con datos de: Javier Cossio

(cirujano plástico, Tel.:78007800),

Darío Suarez (cirujano plástico, Tel.: 70948888),

SBCPER (Tel.: 69134444) y Pilar Manríquez

(psicóloga, Tel.: 73262228)