martes, 15 de enero de 2013

Caminar más de 30 minutos, subir y bajar gradas y una dieta ayudarán a modelar tu cuerpo.



“Luego del gusto viene el susto”, reza el adagio popular. Y es que después del panetón, la picana y el lechón, sumados a los trasnoches y largas jornadas de ocio, llegan como consecuencia los kilitos de más. No te duermas en tus laureles: es el momento ideal para retomar el gimnasio, la natación y las caminatas muy temprano en la mañana, además de una dieta rica en fruta y agua. A continuación te pasamos algunos tips para que este retorno a la realidad no sea tan duro.

Tras el gran consumo de calorías debes asumir la responsabilidad de cumplir un plan de alimentación que te permita bajar de peso. Según la nutricionista dietista Mónica Barreda, tu dieta debe ser completa, con todos los nutrientes que requiere tu organismo, de tal manera que no represente un peligro para tu salud o que genere procesos de rebote y termines con mayor peso del inicial. “Los expertos aconsejan no perder más de un kilogramo por semana para un adelgazamiento saludable”, agrega.

Una vez iniciada la dieta, debes controlar diariamente tu peso, pero sin generar ansiedad. Puede que los primeros días no haya variación o que se incremente por retención de líquidos. “La alimentación es un pilar fundamental para perder peso, pero debe ser acompañada de actividad física para mantener la tonicidad de los músculos y quemar la cantidad de energía acumulada en las zonas estratégicas, como el abdomen y la cintura”, expone Barreda.

Debes incrementar la cantidad de agua ingerida, infusiones o cocimientos de frutas hasta dos o tres litros por día, progresivamente y sin azúcar. Es importante que bebas antes de las comidas principales uno o dos vasos para producir la sensación de saciedad precoz. Consume tres o cuatro frutas y dos platos paneros abundantes de verduras variadas al día, sazonadas con aceite de oliva, así no faltarán vitaminas, minerales y el aporte de fibra necesario para evitar el estreñimiento, sugiere la nutricionista.

Sé disciplinada

Repartir las comidas en cuatro o cinco tomas diarias, evitar los ayunos, no olvidar que el desayuno y el almuerzo deben ser consistentes y las otras comidas más ligeras, todo ello te permitirá bajar de peso sin debilitar tu organismo ni afectar tu estado de ánimo.

Regula tu sistema

El horario de las comidas debe ser constante porque ayuda a regular el sistema digestivo, los niveles de azúcar en la sangre, la insulina y el apetito. Come en un horario regular y no dejes pasar más de cuatro horas entre las comidas o meriendas.

Fuente: Mónica Barreda, nutricionista dietista. Con datos de: http://www.supermujer.com.mx/bienestar/bajar-de-peso-dietas/


No hay comentarios:

Publicar un comentario