El color del cabello que sienta mejor

Los colores de moda o primaverales o el que más gusta, no siempre son los adecuados para cambiar el estilo del cabello. Los tonos marrones, dorados y rubios cambiaron por los rojizos, cobrizos, incluso muy claros, señala la estilista Marlen Rodríguez.

Sin embargo, es el cabello que decide que color sienta mejor a la persona, algunos tonos envejecen.

“Cualquier color puede lucir bien si el cabello está sano”
pelo



Marlen Rodríguez comenta que el cabello en nuestro medio, por lo general, es saludable, grueso y dócil.

Se dice que el cabello grueso tiene una pigmentación natural que tiende a ser rojizo; en cambio, en la zona oriental, donde el cabello es más delgado, el tono natural es inclinado al dorado.

piel

La piel del boliviano, en términos generales, es trigueña y morena, con excepciones. Los tintes cálidos, cobrizos, incluso los dorados son adecuados para cambiar de estilo sin contrastar demasiado. Sin embargo, en cada color de tinte existen tonos que pueden adaptarse a la piel de cualquier persona, aunque a las blancas les queda mejor los colores fríos

salud

El estado de la cabellera y largo, al final, determinan el uso del color. Por más que se elija un rojizo para una trigueña, si el cabello no está sano o el corte no es adecuado, no lucirá bien.

Dice Marlen Rodríguez que el tinte negro, por ejemplo, exige una cabellera saludable y larga, sobre todo juventud. El negro u oscuro, en una persona mayor, endurece las facciones y “envejece”.

Juventud

Los colores que favorecen a las jóvenes son, principalmente, los oscuros y llamativos. Por ejemplo, una mujer de 20 años puede elegir mechas azules, no así una de 40, señala la estilista.

tono de piel

Existen personas de piel blanca en tono rojizo o con pecas, que deben evitar teñir el pelo del mismo color. La persona se vería demasiado encendida. Sin embargo, dentro del mismo color, existe una gama de tonalidades que puede adecuarse a la persona.

combinar

Un profesional del cabello nunca utilizará un solo color para teñir el pelo, a no ser que el cliente lo pida o sea para modificar el pigmento natural. El color del tinte debe encontrarse combinándose al menos dos tonos. Hay profesionales que prefieren hacer capas para lograr el objetivo.