La empresa Yanbal se ha convertido en una plataforma de éxito para que miles de mujeres se vuelvan independientes laboralmente. Evelyn Flores y Clara Ríos son dos ejemplos bolivianos de cómo lograron salir adelante y mejorar la calidad de vida de sus familias.
Son madres y a la vez emprendedoras. Después de afrontar el impacto del desempleo han decidido independizarse y soñar. Optaron por una fuente de ingreso que les está dando la posibilidad de elegir sus horarios y prioridades. Evelyn Flores Quiroga y Clara Ríos Villalba, son dos de las miles de mujeres que han mejorado su calidad de vida en Bolivia de la mano de Yanbal.
Esta empresa líder en desarrollar artículos de belleza en 10 países de la región, se ha convertido en una verdadera escuela del empoderamiento femenino. Y es que la meta de Yanbal hasta el 2030 es fortalecer la economía de más de 100.000 mujeres a través de su programa “Mujer es Poder” que avanza a paso firme en Latinoamérica. Además de lograr independizarse, Evelyn y Clara están discipulando a otras mujeres ayudándoles a cumplir sus sueños. He aquí sus historias.
Mientras otros le cerraron las puertas, Yanbal le dio la oportunidad de crecer
Evelyn Quiroga trabaja con Yanbal hace 22 años, tiempo en el que ha logrado cambiar para bien su vida, tanto en lo personal como profesional. Comenta que hace más de dos décadas llevaba su curriculum a varios lugares en busca de trabajo, pero las puertas se le cerraban, porque se encontraba en estado de gestación. Sin embargo, en Yanbal, no solo le dieron la oportunidad laboral, sino que con el tiempo fue ascendiendo de cargo y actualmente ostenta el título de Directora Status Regional Estrella.
Pero Evelyn no se queda quieta, aspira a subir pronto un peldaño más para convertirse en Directora Master. Además, que cuenta con un grupo de más de 30 mujeres que trabajan con ella y a corto plazo espera tener un centro de capacitación propio. Asimismo, menciona que a lo largo de su carrera en la empresa, ha tenido 13 viajes internacionales, cuatro vehículos 0 kilómetros y logró consolidar su casa propia. También indica que es madre y padre para sus tres hijos; dos se encuentran en el colegio y una ya es profesional.
“Me siento bendecida y contenta. Tomé la decisión de ingresar a esta compañía, porque me enamoré de los productos y compensaciones gananciales, necesitaba tener un apoyo económico para salir adelante. A lo largo de mi carrera he tenido muchas dificultades que las he superado, ha sido un aprendizaje constante para desarrollar mis actividades, ahora me es fácil superar los obstáculos”, comenta.
Evelyn también comenta que una de las cosas más valiosas en su estilo de vida que ha conformado junto a Yanbal, es el tiempo que le dedica a su familia, toda vez que tiene el mal recuerdo de la ausencia de sus padres en los actos escolares. Ahora no se pierde ninguna actividad de sus hijos e intenta tener una buena calidad de tiempo con ellos.
“Mis hijos son el motor de mi vida y darles calidad de vida es una prioridad para mí, son mi inspiración, a pesar de las dificultades es posible empoderarse. Cuando veo la felicidad reflejada en el rostro de mis niños siento que he cumplido. También quiero destacar que es un rasgo en las mujeres bolivianas esa actitud de salir adelante, somos mujeres luchonas”, manifiesta Evelyn.
Cumplió el ansiado sueño de una casa propia y estabilidad económica para su familia
Clara Ríos Villalba trabaja con Yanbal hace 16 años, tiempo en el que realizando sus actividades como contadora y como Directora Regional Status de Yanbal, logró desarrollarse profesionalmente, crecer como mujer y mejorar la calidad de vida de su familia. Es así que señala que la clave está en planificar y organizar detalladamente sus actividades laborales y personales.
Afirma que decidió ingresar a la familia Yanbal, porque vio la oportunidad de cumplir sus sueños con un trabajo independiente sin descuidar a su familia, además que con el pasar del tiempo pudo ayudar a más mujeres a seguir el mismo camino. De esta forma Clara ha logrado construir la casa de sus sueños, tuvo también una boda de ensueño, ayudó a la estabilidad de su madre enferma por 12 años, asume junto a su esposo los gastos de su hogar, ha tenido más de 12 viajes internacionales y dos vehículos 0 kilómetros.
“He aprendido a planificar mis horarios y buscar las horas necesarias para trabajar liderando siempre con el ejemplo. Tengo un hijo al que quiero mucho y continuo en la formación de más empresarias independientes. Considero que todas las mujeres pueden salir adelante solo hay que creer en una misma, trabajar en el yo interior, porque detrás de cada mujer hay una gran empresaria, hay que sacar a flote todo ese potencial”, afirma Clara.
Por último, la emprendedora indica que la mujer boliviana es por esencia valiente, soñadora, luchadora y fuerte, siempre por su familia, por eso considera que todos los días son una oportunidad para aprender y para ganar, pero si no se gana, señala que igual se aprende.
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