domingo, 3 de marzo de 2013
Salud mental Hidratarse para cuidar el cerebro
Comer, beber y dormir son fundamentos de la biología del organismo. No se debe descuidar ninguna de ellas. Tampoco cuánto se bebe, porque la deshidratación perjudica el rendimiento intelectual. La falta de líquido afecta a diversas actividades intelectuales, especialmente a la atención, la psicomotricidad y la memoria inmediata. Así lo muestra un estudio español liderado por la doctora Ana Adan, de la Universidad de Barcelona. Esta se produce cuando la excreción de líquidos excede al consumo de estos, y da como resultado un balance negativo del agua corporal. Cuando el nivel de deshidratación es superior al 2% disminuye la capacidad de memoria a corto plazo y puede afectar a adultos jóvenes y a personas mayores. Por último, se considera severa cuando la deshidratación es superior al 5%, aunque esta situación no es habitual./
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario