Los arquitectos de la corriente de la bioconstrucción aconsejan utilizar materiales naturales para construir el hogar, como la madera.
Los pisos de madera, laminados o flotantes, son una manera elegante y tradicional de revestir los pisos, pero debe tenerse especial cuidado para que duren muchos años.
La propietaria de la carpintería y mueblería Damar, Cristina Medrano Araníbar comenta que la madera, contrariamente a lo que se piensa necesita mantener cierta cantidad de humedad para que sea flexible. Desde las maderas tropicales hasta las más habituales como el roble, pino o haya necesitan “nutrirse” y se lo debe hacer con ceras o productos apropiados para cada tipo de madera.
LIMPIEZA. Habitualmente conviene hacerla con un paño, un cepillo fino o un aspirador. De vez en cuando se puede pasar un paño húmedo con muy poco detergente.
Medrano Araníbar recomienda no mojar los pavimentos de parquet. Lo mejor es utilizar productos especiales para su limpieza y conservación.
Para evitar las rayaduras, utilizar filtros resbaladizos debajo de las patas de muebles y sillas, y tener cuidado con los zapatos de tacón fino que pueden marcar el suelo.
Si con el paso de los años, la capa de barniz del parquet se deteriora o se desgasta en ciertas zonas, se puede pulir y barnizar de nuevo.
MANCHAS. Cristina Medrano indica que no se debe dejar secar las manchas de líquidos y comidas sobre el piso de madera.
Las manchas de chocolate, grasa, aceite o betún de los zapatos se pueden limpiar con un disolvente suave, y alcohol para manchas de bolígrafo, pintabocas u otros similares.
Para un correcto mantenimiento de la madera -ya sea del piso, muebles o roperos- se debe mantener un rango de humedad y temperatura constante. Evitar el agua y detergentes. Proteger las patas de los muebles para no rayar el piso.
Según Cristina Medrano, en supermercados locales existe un producto americano (crema) con silicona que protege las superficies.
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