Cuida tu cabello en cuatro pasos

Para empezar tienes que prestar especial atención al sol de verano o a la práctica de deportes como la natación o el surf en los que el cloro o la sal marina dañan en exceso… o simplemente intentar evitar el estrés o la contaminación de la ciudad que también castigan tu cabello.



Pero como sabemos que la mayor parte de estas situaciones son inevitables, te vamos a dar cuatro sencillos trucos que, a pesar de todo, te ayudarán a proteger el cabello. Podrás seguirlos en casa y lo más importante será la constancia. Los puedes complementar con visitas ocasionales a un salón de peluquería donde un profesional te asesorará.



CUIDA TU PELO EN 4 PASOS



1. El primer paso es cepillarse todos los días el cabello con un cepillo de madera, a poder ser de cerdas naturales. Tómatelo como un momento de relax, por ejemplo antes de ir a dormir. Y así, además de oxigenar el cabello, disfrutarás de un masaje relajante.



2. Cada vez que te laves el pelo, hazlo con agua tibia, y si te atreves, termina con un chorro de agua fría.



3. Utiliza productos adecuados para tu cabello. Aprovecha cuando vayas a la peluquería para que te asesoren. Puedes utilizar tratamientos naturales, caseros, que los puedes elaborar tu misma (con vinagre, aceite, limón…) o tratamientos de venta en el mercado.

4. Cuida tu alimentación. Comer de forma sana y equilibrada, con una dieta rica en vitaminas y minerales, fortalece la estructura capilar y proporciona brillo al cabello. Por otro lado, evita las grasas saturadas y el azúcar refinado.



LO QUE NO DEBES HACER CON TU PELO



Y si estos son los hábitos que debes de seguir, lee atentamente aquellos cuatro que deberás de empezar a evitar:



NO utilizar el secador a temperatura muy alta y muy cerca del cabello.



NO tomar el sol con el pelo descubierto. Intenta cubrirlo con algún pañuelo, el que mejor te vaya con tu bikini. Inclúyelo en tu bolsa de playa como un imprescindible junto a la crema de protección solar. En el mercado también dispones de sprays con protección, champús con filtro solar o mascarillas protectoras.



NO duermas con el pelo recogido.



NO abuses de tintes permanentes, ya que dañan y secan el cabello a pesar de los avances y la mejora que han sufrido este tipo de productos en los últimos años.



Como ves, son sólo cuatro sencillos hábitos para practicar y otros cuatro a evitar. Sin embargo, producirán buenos resultados en tu cabello.