viernes, 21 de enero de 2011

ALERTA CON LOS PROBLEMAS SENSORIALES

‘Mi niño no entiende y se atrasa en las labores del colegio’, es la queja de muchos padres cuando ven el bajo rendimiento escolar de sus hijos. Como remedio, surge el castigo para, suponiendo que el conflicto obedece a que el niño es flojo. Pasa que, a veces, los adultos no perciben que los problemas de sus hijos no son necesariamente de actitud, sino físicos.

Antes de apuntar con el dedo, hay que ponerse en el lugar de un niño. ¿Cómo perciben sus sentidos el mundo que les rodea? Si existe alguna deficiencia, aunque sea leve, puede causar problemas de aprendizaje, sociabilidad y conducta en la escuela.

Existen hoy métodos sencillos que han logrado mejorar el desempeño de los menores en el colegio y su calidad de vida. Si los chicos son tratados a tiempo se pueden evitar traumas, reproches y castigos innecesarios.

IDENTIFICACIÓN DEL PROBLEMA
Que tu hijo de pronto tenga que pegar su rostro a un libro para leerlo o ‘achinar’ los ojos para distinguir una letra son los primeros síntomas de que su vista no está bien y que quizá necesite anteojos. Que un niño use lentes resulta un tanto tormentoso por las burlas típicas de los amigos en la escuela y la incomodidad de usar algo que no es de su cuerpo. Pero es bueno hacer entender al pequeño que va a ver el mundo con ojos nuevos, que ampliará su visión y obtendrá la información de manera más eficaz, explica en su página web, Tanni Anthony, director del servicio para niños sordociegos de Colorado.

Tras una buena medición es necesario comprar un armazón que se ajuste a su pequeño rostro. Existen en las ópticas variedad en colores y diseños para conquistar el gusto de los pequeños. Es importante verificar que las medidas de los vidrios coincidan con las de la receta del oculista. Para que el niño se acostumbre a sus nuevos anteojos es recomendable que los use un poco cada día y no obligar a llevarlos.

OÍDOS QUE NO ESTÁN ATENTOS
Otro factor que influye en el aprendizaje es no escuchar bien. La mayoría de las personas tiene la capacidad de separar los ruidos externos de la voz del maestro en el aula, pero existen menores que no han desarrollado esa facultad. Entonces, se distraen con la mínima bulla.

Oír es la facultad para percibir sonidos, mientras que escuchar implica la habilidad de seleccionar y separar los ruidos de importancia.

Si percibe que hay un rechazo del menor para ir al colegio desde el primer día, ve conductas agresivas o regresivas, distracción, hiperactividad, le pide constantemente que se le repita lo dicho o está como ausente es posible que tenga este problema. Para solucionarlo necesita consultar con un otorrinolaringólogo que hará un análisis del sentido del oído del menor, descartando o confirmando algún problema.

Existen aparatos auditivos hechos para las pequeñas orejas de los niños, que se adaptan a la perfección. Si el problema se detecta a tiempo puede mejorar su conducta, porque, a veces, estos chicos son agresivos y poco sociables, porque no pueden comunicarse ni comprender lo que se les dice.

El problema puede no ser tan grave y, con la ayuda de los maestros, se puede solucionar este inconveniente. Según un estudio publicado en la página tomatis.8k.com, existen niños que han solucionado este inconveniente desarrollando la memoria visual, pero antes se recomienda a los padres que estén alerta.

ALGO MÁS QUE TENER MALA LETRA
Frases como ‘tus letras parecen garrapatas’ son típicas, pero el problema va más allá cuando se detecta disgrafía, un trastorno de la escritura en que no se puede reproducir en papel las palabras que se escuchan o se copian. Según wordpress.com, se identifica por la rigidez a la hora de escribir, la lentitud para reproducir dictados o copias, e incluso que el niño quiera tener un control y una perfección absoluta de lo que escribe. Se puede tratar practicando con el lápiz, con la postura adecuada y con dictados diarios.

Motivación
Anteojos. Cuando se trata de usar los anteojos por primera vez es necesario que el niño escoja el modelo que va a usar. Colores, dibujos y el armazón son muy importantes para que se luzcan. Por ejemplo, si quiere incentivarlo a usar anteojos, puede optar por mostrarle a los ídolos de moda que usan gafas, como Harry Potter. No obligue a su hijo a usarlos todo el día, sino provocará el rechazo y la negativa rotunda de su hijo. Mejor pídale que use sus nuevos anteojos en períodos de tiempo. Todo dependerá de la recomendación que proporcione el oculista.

Audífonos. Antes se creía que sólo los adultos tenían que usar audífonos, pero en realidad una vez identificado el problema es necesario no hacer hincapié en ese detalle ante los niños que van a usar un audífono para no crear malestar. Colores, formas y tamaños han sido utilizados para la comodidad de los pequeños. Es necesario que los padres les hagan entender los beneficios que le aportará a su vida este aparato y que con el tiempo se les hará algo cotidiano y que pasará desapercibido.

Lápices. Para conseguir una mejor escritura, en las listas de útiles de los colegios se han empezado a pedir los lápices ‘ergonómicos’ o triangulares. Según estudios, estos lapiceros ayudan a que el niño que comienza a escribir lo haga de manera más sencilla. Además, su forma triangular permite que se los sostenga con más facilidad. Actualmente, en las librerías no sólo se encuentran los típicos lápices de color negro, sino que también hay marcadores.

Tips de belleza

Anteojos siempre limpios
Si tienes a la mano un desinfectante en aerosol, además de emplearlo para lo obvio puede servirte para dejar tus lentes como nuevos. Sólo rocía un poco en los vidrios y con un paño de algodón aprieta un poco en ambas superficies. Verás que quedan opacos, espera un poco y luego comienza a limpiarlos en forma circular hasta que el pañito no deje huella. Verás que en cuestión de minutos tus anteojos quedan relucientes y como si fueran nuevos.

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