El tomate para estar radiante

Se lo aprecia en ensaladas, zumos y salsas por su potencial gastronómico y dietético. Pero también por sus innumerables virtudes para incrementar la belleza de nuestra piel y cabello.

El tomate puede ser utilizado en máscara para un efecto refrescante y tónico sobre la epidermis. Para eso, aplástalo y añade palta para atenuar su acidez. Déjalo actuar sobre tu rostro durante 15 a 20 minutos y luego, acláratelo con abundante agua tibia. Asimismo, úsalo para eliminar tus puntos negros y otras imperfecciones, ya que la acidez contenida en el tomate los hará desaparecer. En este caso, aplícalo localmente durante 30 minutos por día y luego lávate. Esta técnica funciona a corto y largo plazo. Además, el tomate suele reducir la dilatación de los poros. Mezcla el zumo de esta verdura con un poco de jugo de limón y aplica esta mixtura sobre tu cara con movimientos circulares y un algodón. No olvides aclararte con agua fría.

Las vitaminas A y C que contiene permiten disminuir la cantidad de sebo en la piel, lo que suele quitar el aspecto grasoso. Sin embargo, debes hidratar tu epidermis adecuadamente para tener un efecto óptimo.

Este fruto es ácido, pero también lleno de agua y sales minerales. Se puede aplicar su pulpa sobre la piel para hidratarla y aliviar las quemaduras de sol, ya que calma la epidermis y le provee el agua que necesita. Asimismo, el extracto de tomate es recomendado para broncearse, ya que el licopeno que contiene es más eficaz que el beta-caroteno. Por lo tanto, consúmelo frecuentemente antes de exponerte al sol.

Por otro lado, también nuestro cuero cabelludo puede beneficiarse de las virtudes del tomate, ya que ayuda a eliminar la caspa y repara los daños capilares. Aplica un poco de zumo de tomate como acondicionador durante 5 minutos y luego, enjuaga con abundante agua.



¿Qué?

Su poder antiarrugas rejuvenece tu epidermis

Algunas marcas famosas de cosméticos utilizan el tomate para disminuir las arrugas en el rostro. Puedes realizar tu propia máscara antiarrugas casera. Para eso, pela dos tomates, saca las pepas y aplasta la pulpa con un poco de zumo de limón. Añade una cuchara de aceite vegetal. Luego, aplica esta preparación sobre tu rostro, evitando el contorno de tus ojos. Deja reposar un par de minutos y aclara con agua. Debes efectuar esta máscara dos veces por semana para que sea eficaz.

Frutas rojas para tu rostro

frutilla

Realiza un peeling casero para rejuvenecer tu epidermis. Licúa 3 frutillas y mézclalas con un poco de zumo de limón. Aplica esta preparación sobre tu rostro, efectuando movimientos circulares. Puedes realizarlo 2 veces por semana. Sin embargo, antes de hacerte este peeling, debes averiguar que no presentes reacciones alérgicas. Por lo tanto, coloca un pedazo de frutilla sobre tu muñeca y déjalo durante 5 minutos.

frambuesa

Esta fruta tiene propiedades tónicas, hidratantes y refrescantes. Se recomienda su uso para las pieles que estén deshidratadas. La puedes aplicar en máscara, licuando unas 10 frambuesas con limón y aceite vegetal. También como loción cotidiana para refrescar tu epidermis.

cereza

Elabora una loción calmante y astringente con miel, cerezas y vodka. Saca las pepas de la fruta y aplasta su pulpa. Luego, mézclala con 3 cucharas de miel y 4 de vodka. Deja reposar esta mixtura durante 3 días en la nevera. Después, filtra la preparación y vierte la loción obtenida en un frasco. Aplícala sobre tu rostro con un algodón. No hace falta aclararte el rostro con agua.