jueves, 10 de julio de 2014

Aceites: la última revolución beauty

Cleopatra ya se aprovechaba de sus beneficios en el Antiguo Egipto y en la actualidad los aceites esenciales han vuelto a lo más alto de la cosmética gracias a las fórmulas mejoradas y directamente relacionados con la belleza capilar y de la piel. “Los de última generación, lejos de esa sensación pegajosa que parecía no absorberse nunca, vienen provistos de texturas sedosas que proporciona todo lo necesario para conseguir un rostro, cabello y cuerpo sano y bello gracias a sus ingredientes naturales”, afirma la dermatóloga Paz Cerdá, de la Academia Española de Dermatología en el último número de Vogue Belleza.

Este boom viene propiciado también porque los aceites de belleza no sólo tienen una función –como suele pasar con los cosméticos más tradicionales–, valen para todo y además su aplicación se convierte en un ritual placentero que involucra todos los sentidos.

“Es un producto polivalente que puede ser utilizado por todo tipo de pieles, sin excluir las grasas y mixtas, ya que existen ingredientes como el aceite de jojoba o la lavanda, que regulan y eliminan en exceso de sebo”, asegura esta experta.

De caléndula, almendras, jojoba, argán, coco, rosa mosqueta... Descubre los beneficios de los aceites esenciales más codiciados y su modo de uso en el universo beauty.

BENEFICIO 1. Bondades. Entre sus bondades se encuentran la de limpiar la piel –en especial el contorno de ojos-, hidratar y nutrir -ya que previenen la sequedad y aportan elasticidad–, proteger -contienen numerosos beneficios protectores y reparadores para la piel y rejuvenecer (con ingredientes como Vitamina C y retinol).

BENEFICIO 2. Cuerpo perfecto. Celulitis, estrías, flacidez… los aceites pueden combatir cualquiera de estos problemas al mismo tiempo que hidratan y reparan. El de rosa mosqueta es una buena opción para deshacerte de cicatrices y estrías, así como el de coco, el cual rejuvenece la piel gracias a sus componentes antioxidantes.

BENEFICIO 3. Para tus emociones. La magia de los aceites nos hace restablecer el equilibrio psicoemocional en 5 minutos. Es una opción sana e inocua para tratar la ansiedad y el insomnio. Y es que los aceites esenciales contienen unas sustancias que afectan a nuestra química de una manera muy especial, por eso son perfectos para utilizarlos también como aromaterapia. Actúan en el sistema límbico, donde se almacenan los recuerdos de modo que el aroma nos trae un recuerdo y este, una emoción.

BENEFICIO 4. Cabello de infarto. La principal virtud de los aceites capilares es la nutrición. Con sólo unas gotas de medios a puntas, el cabello adquiere los nutrientes necesarios para lucir sano. Es la única textura capaz de adherirse a la fibra capilar –la queratina repele el agua– y es la panacea de los cabellos deshidratados y opacos. Se puede utilizar como tratamiento intensivo, dejándolo actuar durante unas horas.

BENEFICIO 5. Reparación y brillo. El aceite sella y normaliza la cutícula, lo cual es perfecto para cabellos teñidos o dañados que abusan de las herramientas de calor como el secador. Además, flexibiliza la cutícula, sin romperla, al contrario que otros cosméticos. Y claro, una cutícula dañada no refleja la luz del sol y el cabello se vuelve apagado. El aceite de argán y el de oliva son los más recomendables para obtener brillo y luminosidad, además de una ración extra de antioxidantes.

BENEFICIO 6. Uñas perfectas. Sí, además de pasar el aceite de cuerpo por tus manos, hay especializados para hidratar tus cutículas y olvidarte de la resequedad y los padrastros. Muestra un manicure de envidia con las propiedades del aceite de almendras o ayuda a fortalecer tus uñas con el de durazno.

BENEFICIO 7. Limpieza a fondo. Y sí, el aceite también se ha posicionado como un producto de enorme eficacia en los tratamientos corporales y para el rostro, por ejemplo, es perfecto para limpiar el cutis y, en especial, la zona del contorno de ojos. La ventaja de los limpiadores oleosos es que tienen un gran poder para arrastrar las impurezas y, a la vez, minimizan la acción irritante que producen muchos agentes limpiadores que suelen incorporar este tipo de de cosméticos.

BENEFICIO 8. Oro líquido. Además, previenen la sequedad, suavizan y aportan elasticidad a la piel, ya que sus ácidos grasos contribuyen a restaurar los niveles naturales de humedad. Las texturas oleosas añaden a la piel una elevada cantidad de lípidos que logran una efectiva acción oclusiva, favoreciendo la penetración de los activos incorporados en sus fórmulas. Y además, sea invierno o verano, los productos en aceite contienen numerosos beneficios protectores y reparadores de la piel. Cualquier temperatura extrema puede ser muy agresiva para la piel. Los aceites tienen capacidad demostrada para proteger la piel, sobre todo el efecto que puede causar el efecto gélido sobre las células cutáneas.

BENEFICIO 9. Aceite para el acné. En contra de lo que podría creerse, hay aceites que pueden entrar a formar parte del arsenal contra el acné. Porque no solo no obstruyen los poros, agravando la infección típica que acaba en granos, sino que plantan cara a las bacterias responsables. Algunos dermatólogos que optan por lo natural, optan por los aceites con propiedades antisépticas, cicatrizantes, antiinflamatorias e, incluso, anti-rojeces con efectos beneficiosos en la batalla contra el acné.

Los expertos en cosmética natural coinciden es en que hay perder el miedo a los aceites para el rostro, incluso para pieles grasas y con tendencia acneica. “Los aceites penetran con mayor facilidad que las cremas y, al ser activos naturales, la piel los absorbe directamente sin necesidad de otras sustancias conductoras”, afirma Mónica ceño, creadora de The Lab Room.

Entre los aceites que funcionan bien en pieles acneicas están los siguientes: el de árbol de té; el de laurel, antibacteriano y con gran poder limpiador gracias al ácido láurico; el calophylum, muy buen agente anti-infecciones. Y hay más: la avellana, la papaya, que limpia la piel y regula la secreción de grasa, y el yangu, por su poder matificante. El aceite de rosa mosqueta, alto en vitamina A, ayuda a regenerar la piel y contiene la aparición de manchas propias de pieles con acné. Y, en cualquier caso, huye de los aceites minerales derivados del petróleo.

SU MISIÓN ESPECÍFICA

Los aceites tienen todos los beneficios de las plantas hiper concentrados, por eso cada aceite tiene una misión específica, casi mágica, sobre nuestro rostro, piel, cabello, uñas... ¿Pero qué beneficios aporta cada uno?

Magia 1: Caléndula: es el mejor para tratar eccemas, dermatitis y todo tipo de pieles inflamadas. Buen remedio para calmar las quemaduras solares.

Magia 2: Almendras: además de ser un placer para el olfato, es un poderoso humectante que es capaz de dejar la piel suave como la seda y consigue prevenir la aparición de estrías.

Magia 3: Argán: su alto contenido en vitamina E lo convierte en un gran antioxidante y, por lo tanto, en un buen aliado contra el envejecimiento.

Magia 4: Coco: es un aceite polifacético que limpia, hidrata y nutre la piel. Aplicado por la noche, elimina la suciedad acumulada durante el día. Además, fortalece el pelo seco y dañado.

Magia 5: Jojoba: es el más compatible con la piel del cuerpo, el rostro, el pelo y las uñas. Destacan sus propiedades protectoras y antiinflamatorias.

Magia 6: Rosa mosqueta: rico en vitaminas y antioxidantes que penetran hasta las capas más profundas de la piel, posee múltiples efectos regeneradores.

Magia 7: Oliva: el dorado líquido potencia el brillo y la suavidad de la piel manteniendo su hidratación y firmeza. También fortalece la queratina que conforman las uñas y el cabello.

Magia 8: Karité: hidrata y protege la piel en profundidad. Sus ácidos grasos confieren a nuestras células una película protectora que las preserva de los agentes externos.



QUICKIE

Para una piel hidratada, no te duches más de 10 minutos, sino la piel comienza a perder agua. Aplica la crema hidratante dentro de los 3 minutos de finalizada la ducha o baño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario