Debes realizarte una exfoliación (también llamada peeling) porque aporta suavidad a la piel, además de volverla lisa y luminosa. También elimina las células muertas de los tejidos cutáneos, las cuales suelen proveer un tono apagado a tu tez. De esta manera, conservarás tu bronceado por más tiempo. Es importante destacar que debes elegir un producto de exfoliación adaptado a la zona de tu cuerpo y a tu tipo de piel. Puedes efectuarte un peeling mécanico, aplicando con movimientos circulares una crema que contiene ingredientes específicos, los cuales permiten sacar los residuos e imperfecciones de la epidermis. Su uso es indicado para el cuerpo y conviene a las personas que tienen la piel mixta. Por otro lado, la exfoliación química es recomendada para el rostro y la epidermis sensible. Consiste en una mascarilla rica en ácidos de frutas que suprimen las células muertas a través de un proceso químico. Para mantener tu bronceado, debes hacerte un peeling semanal en la totalidad de tu cuerpo. No dudes en pedir ayuda a tu entorno para alcanzar algunas zonas como la espalda, por ejemplo.
El cuidado del cabello
Es fundamental cuidar tu cabellera, ya que el sol puede afectarla. Toma en cuenta que no sirve lucir una piel bronceada cuando tienes el pelo dañado, ya que esto arruinará tu aspecto general. Si te expones al sol progresivamente, no existe ningún riesgo para tu cabello, ya que los rayos solares le proveen reflejos naturales y estimulan la circulación sanguínea en los vasos que irrigan el cuero cabelludo. Sin embargo, el sol deseca el pelo cuando te expones en exceso. Asimismo, suele agredir la piel de tu cabeza y favorecer la aparición de caspa. También perturba la evacuación de ácidos grasos presentes en el sebo, lo que fragiliza las fibras capilares. Finalmente, el cloro y la sal marina tienden a irritar el cuero cabelludo. Para proteger tu cabello, es imprescindible evitar exponerte al sol entre las 11:00 y 15:00 horas. Si efectúas un baño de sol prolongado, debes utilizar un gorro. Por otro lado, lava tu cabellera con champús suaves y aplica mascarillas semanalmente. También puedes usar cremas, aceites o espumas reparadoras, las cuales encuentras en los comercios. No olvides que si has obtenido reflejos naturales que te gustan, tienes que comprar productos capilares a base de manzanilla para prolongar sus efectos.
Mantén tu piel atezada y disimula las imperfecciones
Nutrición
Varios alimentos te permiten gozar de tu bronceado por más tiempo. Es el caso de las frutas y verduras ricas en beta-caroteno. Este principio activo estimula la producción de la melanina, la cual es un pigmento que brinda el tono bronceado a la piel. También puedes ingerir complementos alimenticios de beta-caroteno. Para tener efectos óptimos, consúmelos antes y durante tu exposición al sol. Se aconseja seguir con esta ingesta 2 meses luego de haberte expuesto a los rayos solares para que tu organismo siga secretando melanina.
Maquillaje
Puede ser necesario acudir a las propiedades del maquillaje para disimular las imperfecciones de tu bronceado ocasionadas por los lentes de sol o el bikini. Debes optar por un tono de base de maquillaje adaptado a tu aspecto dorado. Asimismo, es importante aplicarla sin excesos, solamente para disimular los pequeños defectos. Por otro lado, puedes también usar sombras de ojos para intensificar tu mirada. Utiliza los tonos pasteles, ya que son los que más convienen a la piel bronceada.
EXPOSICIÓNPROGRESIVA
Para conservar tu bronceado durante unos meses, es necesario exponerte progresivamente al sol, ya que si te quemas, aparecerán pieles muertas, las cuales apagan el tono de tu tez. Asimismo, luego de haber obtenido el bronceado que deseabas, no debes encerrarte en tu casa, ya que el tono dorado adquirido podría desaparecer. Es imperioso que tu epidermis siga en contacto con el sol, inclusive cuando los rayos solares sean de menor intensidad. De esta manera, debes privilegiar las actividades al aire libre como las caminatas. También puedes efectuar deportes para mantenerte en forma (trote o bicicleta, por ejemplo).
HIDRATACIÓN PROFUNDA
Una de las mejores maneras de prolongar tu bronceado consiste en hidratar tu epidermis y así, evitar la aparición de pieles muertas. Puedes utilizar una crema, loción o aceite según la textura que prefieres. Lo ideal es aplicar el producto en la mañana y noche. De esta manera, tus tejidos cutáneos podrán regenerarse y luchar contra las agresiones exteriores. Asimismo, se aconseja optar por los cosméticos hidratantes que contienen protección contra los rayos solares UVA y UVB para precaver los potenciales daños cutáneos. Toma en cuenta que las lesiones en la piel reducen el bronceado y acarrean una serie de enfermedades o rasgos antiestéticos.
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