Para la belleza, los beneficios de las rosas son altamente efectivos. En el cuidado de la piel estas mejoran el aspecto de las cicatrices. Ayudan a tratar los signos de la edad, rejuvenecen la piel y combaten la resequedad excesiva.
Por eso, es recomendable que su uso sea principalmente para las personas que tienen piel sensible o seca ya que así permitirá que sus nutrientes hagan efecto restaurando la epidermis dañada. Aquí una mascarilla que deja la piel suave. Para su proceso de preparación lo primero que debe hacer es machacar un puñado de pétalos de rosa frescas hasta que forme una sustancia similar a una pasta. Posterior a ello agregue una cucharada de miel líquida y una cucharada de yogurt, mezcle los ingredientes y por último agregue dos cucharadas de agua de rosas y revuelva hasta obtener una consistencia similar a la de una crema. Aplique sobre su rostro, cuello y escote por 25 minutos, y finalmente retire con abundante agua tibia
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