Posturas adecuadas para tener un cuello hermoso

Según dicen, la belleza cuesta, y aunque algunos creen que es escurridiza, es posible llegar a ella tomando algunas sencillas medidas. El cuello es una de las partes más importantes, hablando estéticamente, aunque muchas personas no se percatan de los cambios que pueden existir en esta área.

De nada sirve mantener un rostro terso y libre de imperfecciones, si la verdadera edad se revela unos centímetros más abajo, con líneas (anillos de Venus) y hasta la temida doble papada.

Es sustancial adoptar una postura erguida para favorecer la tersura del cuello y evitar tensiones. Si se trabaja la mayor parte del día sentado o de pie, cada cierto tiempo debes mover el cuello hacia los lados, elevar los hombros y soltarlos. Esto también te ayudará a librar el estrés o cansancio.

Otros ejercicios que se sugieren son: girar la cabeza hacia la izquierda y después hacia la derecha, lentamente. Luego, bajar la barbilla hasta tocar el pecho y levantar la cabeza devolviéndola a su posición natural.

Procura tener la espalda recta mientras realiza estas actividades. Adicionalmente, es conveniente elegir una almohada fina para dormir o no utilizarla.

Si te gusta leer en la cama, trata de incorporarte con varios almohadones, esto te servirá para evitar pegar la barbilla al pecho.