Cuando de abundancia de curvas se trata

Sabemos por la historia que desde los albores de la humanidad, un busto grande ha significado estar mejor dotada para cuidar de la subsistencia de la prole. En pleno siglo XXI, tal vez no es lo primero en lo que pensamos, pero sí, en la poderosa atracción que un busto bien formado puede lograr, además de armonizar las proporciones de tu cuerpo. Prueba de ello, las miles de cirugías estéticas a las que las mujeres se someten cada año para incrementar su tamaño.

En nuestra anterior entrega prometimos abordar el tema exactamente opuesto al del busto pequeño. Cómo hacer que un busto grande luzca hermoso y se vea siempre proporcionado con relación a nuestra anatomía.

Para ello afinaremos nuestro escote en base a los siguientes consejos:

- Utiliza un buen corpiño, con espalda y tirantes anchos.

- Busca siempre líneas verticales y escotes en punta, ellos afinan y estilizan.

- Los materiales de nuestras prendas deben ser ligeros y de buena caída, nada con texturas rígidas o muy gruesas.

- No a los tejidos adornados, recargados o muy claros para esa parte de nuestra anatomía.

-Utiliza colores enteros o estampados pequeños que afinen, no que destaquen volumen.

-Líneas verticales o sesgadas serán una elección ideal que brinde una línea elegante a tu busto.

-Diremos que el brillo debe ser manejado con sobriedad, especialmente en la zona en que nos enfocamos.

-Los collares alargados serán los más indicados en este caso.

Debemos recordar que un busto destacado, con las prendas y el estilo adecuados, puede no solamente ser atractivo, sino tu mejor arma de seducción, después de tu cabeza, desde luego.