Lindas rodillas y rejuvenecidas

Las rodillas son una parte del cuerpo que descuidamos frecuentemente. Sin embargo, sostienen la estructura esquelética y tienen una importancia relevante en nuestra apariencia. Los tejidos cutáneos que cubren las articulaciones de las rodillas pueden tener un aspecto áspero. Esto es causado por la falta de hidratación natural (las glándulas sebáceas no se concentran en las rodillas) y el constante roce con la ropa. Por lo tanto, debes hidratarlas dos veces por día para evitar que la piel se arrugue precozmente. Se sugiere optar por el aceite de argán, ya que regenera las células y previene el envejecimiento celular. Otra opción consiste en la manteca de karité, la cual es una excelente fuente de ácidos grasos con alto poder hidratante. Asimismo, no debes olvidar depilarte las rodillas porque tenerlas cubiertas de vello es altamente antiestético. Además, esto acentúa las imperfecciones.

Es relevante destacar que mucha gente presenta celulitis en sus rodillas. Para volver a tener una piel tónica, Nina Roos, dermatóloga francesa recomienda en el artículo “Astucias para rejuvenecer las rodillas” publicado en la revista “Medisite” que las personas se efectúen masajes diarios durante 15 minutos. Deben realizar movimientos firmes con los dedos de abajo hacia arriba. Pueden también utilizar aceite vegetal para optimizar el efecto de los masajes e hidratar simultáneamente las rodillas.

Ejercicios benéficos

Es fundamental cuidar las rodillas para que tengan un aspecto estético impecable. El deporte permite drenar, desintoxicar y mejorar la tonificación de esta parte de las piernas. Existen diferentes ejercicios que puedes efectuar. Primero, colócate de pie, ubicando tu pierna derecha hacia delante. Flexiona la rodilla hasta que forme un ángulo de 90°. Luego, recupera tu posición inicial. Repite este movimiento 20 veces antes de cambiar de pierna.

Otro ejercicio eficaz consiste en echarte sobre tu espalda y doblar las rodillas para que se ubiquen en el pecho. Luego, estira las piernas. Debes efectuar esta acción 20 veces cada día para tonificar las rodillas de forma óptima.

Es también recomendado trotar con pierna alta, es decir, llevando las piernas más arriba de lo normal para ejercitar plenamente las articulaciones y músculos internos de la rodilla. Si no estás acostumbrado a realizar deportes intensos, empieza por trotar cada día durante 10 minutos y aumenta progresivamente la duración de tus sesiones.