Internet. Según la sexóloga Irene Moreno, las fotografías y videos que se envían entre celulares corren el riesgo de ser subidos a la red internet y ser vistos por familiares y amigos cercanos. "Pasó de ser algo íntimo a materia pública", aseveró Moreno.
Ojo con pedófilos. Al pasar de privado a público, en la red internet, estas fotos o videos pueden llegar a manos de pedófilos. "Es decir, a aquellas personas que tienen atracción sexual con menores de edad", aclaró la especialista.
Pornografía. "Dado que el uso de internet es ilimitado para cualquier persona, un mal uso puede llegar incluso a promover la prostitución de la menor que haya sido fotografiada o grabada", advirtió Moreno, a tiempo de indicar que se han visto casos de diferentes páginas web con nombres, apellidos e incluso dirección con números de teléfonos celulares de las menores.
Extorsión. "Si la foto o el video se trata de una persona pública, puede ser la herramienta perfecta para extorsionarla", sostuvo la abogada Verónica Sánchez, a tiempo de indicar que casos como esos se ven a diario en los hogares, "pero muy pocos se denuncian".
Motivo de bullying. La psicóloga añadió que uno de los riesgos más latentes del sexting "es ser víctima de bullying en el colegio o escuela, donde la menor se desempeña todos los días y casi la mitad del día. Los chicos no miden las consecuencias de sus palabras o actos, más aún cuando están en la adolescencia y en el afán de burlarse por la foto o video dañan a la menor".
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