¿Senos en vez de pectorales?

Era demasiada vergüenza para ser soportada, incapaz de sacarse la polera en la clase de educación física debido a sus grandes mamas, J.S. un adolescente de colegio, decidió acudir a un especialista para que le realizaran una ginecomastía. Su caso, lanza de nuevo a la luz pública que los hombres también acuden a las cirugías para mejorar su aspecto. Según Rember Lijerón Arias, médico cirujano plástico, de la clínica de estética avanzada Laser MakerOver, y miembro de la Sociedad Boliviana de Cirugía Plástica el 15% de sus pacientes son varones.

Tipos de casos. El hombre al igual que la mujer tiene glándulas mamarias, pero son muy rudimentarias. En algunos pacientes por alguna razón, que puede ser hormonal o problemas de peso, se les desarrolla más que otros. Lijerón explica, que se dan dos casos, la ginecomastía verdadera, que es el crecimiento anormal de la glándula mamaria en el hombre. Para su tratamiento, se requiere cortar y retirar la glándula mamaria. El otro caso, la pseudoginecomastía, es tan solo el acúmulo de grasa debido al exceso de peso, problema que con una lipoaspiración se resuelve, indicó el cirujano.

A tomar en cuenta. La ginecomastía puberal suele disminuir en unos seis meses, aunque a veces puede persistir durante dos o tres años. En los adolescentes, la presencia de tejido mamario puede ser causa de inseguridad y problemas psicológicos, sobre todo en la época de verano, que es cuando suele ser más evidente, puesto que están entonces con el torso al descubierto. Es conveniente tranquilizarles explicándoles que es un hecho bastante frecuente en uno u otro momento de la adolescencia.