Crema para cada lugar

La piel del rostro es distinta a la del resto del cuerpo, tanto por su textura como por su sensibilidad. En consecuencia, las diferentes cremas que utilices también deben ser específicos para cada lugar de la cara, para que así se pueda aprovechar de la mejor manera posible.

EL MAL USO. Si las cremas no se saben aplicar pueden ocurrir dos fenómenos: se perjudica o irrita la piel: si, por ejemplo, se aplica crema para manos en los párpados.
No se logran los efectos esperados: colocarse crema para párpados en las manos no causa daño, pero tampoco resultará beneficioso (además, sería muy caro).

CADA ZONA DEL ROSTRO. Los párpados en una zona muy delicada y sensible tienen una capacidad de absorción superior a la de otras zonas, como el dorso de las manos, entonces necesitan absorber sólo la cantidad adecuada de crema, sin irritar. Se aconseja: una crema específica que incluya principios activos útiles para aumentar el drenaje linfático, quitar el color oscuro de las ojeras y provocar mayor tensión.
En el centro facial o zona de la nariz, pueden aparecer pequeños vasos (venitas rojas). Se aconseja: emulsiones o geles no grasos (agua en aceite).
En los pómulos y frente pueden aparecer manchas del sol, se aconseja cremas más grasas con ceramidas.
Las pequeñas arrugas en las mejillas aparecen cuando la piel sufrió un daño solar o por falta de humectación. Se aconseja: tratamientos que humecten la piel rápidamente