El paso a paso. Es un tratamiento que tiene tres pasos, explica la doctora del centro de medicina estética Life Med, Mónica Startary. El primero, se hace una exfoliación según cada zona del cuerpo. ¿Por qué? La especialista explica que la piel es el órgano que más rápido se regenera, lo hace cada 72 horas. En este tiempo se llena de impurezas por lo que se tiene que limpiar. Para cada parte del cuerpo ya sean las piernas, la espalda, el abdomen o los glúteos, existe un exfoliante. Para zonas como las axilas, la entrepierna, los pies o las manos se emplean exfoliantes blanqueadores que son más aclarantes. Luego de hacer esto, la piel automáticamente adquiere un aspecto luminoso. Ahora no es que vaya a quedar blanca, enfatiza Startary, sino que esta sustancia aclara estas áreas ya que este órgano sufre pigmentaciones provocadas por las agresiones que causa la exposición solar.
Complementa la terapia. Después de la exfoliación, se procede a realizar un baño en todo el cuerpo. Luego se aplica una sustancia blanqueadora que aclara el tono de piel y quita el antiguo color provocado por los factores externos del ambiente. Como tercer paso la paciente se da un baño de terapia de sales y pasa a la chocolaterapia, explica Startary. "Se aplica chocolate enriquecido con vitaminas y esencias para nutrir la piel y brindar un aspecto suave, con color e iluminación", dice la especialista.
Piel limpia. Otro beneficio de este método, es que elimina los restos de células muertas, preparando la piel para que pueda absorber las propiedades de las cremas que puedan colocarse después del blanqueamiento, resalta Mónica. "Si la piel está llena de células muertas ninguna crema que se aplique será efectiva ya que todo lo que se aplica se queda para estos elementos", puntualiza.
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