jueves, 18 de diciembre de 2014

CIERTOS COSMéTICOS POSEEN ALGUNOS COMPONENTES QUE SON TóXICOS PARA EL ORGANISMO E IRRITAN LOS TEJIDOS CUTáNEOS.

Las personas utilizan los productos de belleza a diario para su higiene personal y para mejorar su aspecto físico. Los principales riesgos asociados a algunos componentes químicos son cutáneos. Se pueden observar irritaciones, alergias y fotosensibilización. Asimismo, ciertos ingredientes que se encuentran en los cosméticos comprenden elementos cancerígenos, pesticidas y toxinas que afectan al sistema reproductor y son muy nocivos para el organismo. Pueden perturbar las funciones endocrinas que son controladas por el hipotálamo, hipófisis, tiroides, ovarios, testículos, páncreas, entre otros. Estas glándulas regulan el funcionamiento de las hormonas, tanto para manejar la energía, mantener el control del metabolismo y permitir la reproducción.

Por estas razones, la mayoría de los fabricantes de cosméticos deben indicar la lista completa de ingredientes que componen los productos de belleza. Sin embargo, muchas personas no saben cuáles son los elementos dañinos. Es fundamental que no te dejes engañar por las promesas que ofrecen los productos y que sepas descifrar los componentes que se encuentran en su etiqueta.

Por lo tanto, te proveemos los ingredientes más perjudiciales para tu cuerpo. Son los que debes evitar al máximo en el momento de adquirir un cosmético.

Dos sustancias que pueden deteriorar tu salud

Lauril sulfato de sodio

Puede aparecer en las etiquetas también como sulfato de sodio laureth. Esta sustancia permite incrementar la espuma de los productos. Por lo tanto, se encuentra en algunos champús, jabones líquidos y lociones para el rostro. El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) clasifica este componente como potencialmente cancerígeno para los humanos. Asimismo, suele irritar la piel y los ojos. Por otro lado, es un elemento que no se degrada fácilmente, es decir que puede permanecer en el ambiente luego de haber sido evacuado en las canalizaciones de la ducha. De esta manera, consiste en un contaminante ambiental importante.

Triclosán

Es generalmente utilizado como agente conservador y antibacteriano en los desodorantes, limpiadores y desinfectantes de manos. El triclosán penetra en la epidermis y puede interferir con el sistema hormonal. Además, irrita la piel y los ojos. La Unión Europea lo clasifica como muy tóxico para el ecosistema, ya que es un contaminante ambiental. De esta manera, se recomienda evitar comprar cualquier producto que contenga este ingrediente químico nocivo tanto para el humano como para el medioambiente.

BHA – BHT

El hidroxibutilanisol (BHA) y el hidroxibutiltolueno (BHT) son antioxidantes sintéticos que se utilizan como conservadores en los labiales, lociones, productos hidratantes y otros numerosos cosméticos. Estos componentes pueden provocar reacciones alérgicas y son sustancias potencialmente cancerígenas para los humanos. Asimismo, perturban las funciones endocrinas. Además, el BHT es nocivo para los pulmones y altera la coagulación de la sangre.

DEA

La dietanolamina (DEA) se añade a los cosméticos para volverlos espumosos. Asimismo, controla el pH, ya que neutraliza la acidez de otros ingredientes. Se encuentra principalmente en los jabones, desmaquillantes y champús. El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) la describe como una posible sustancia cancerígena. Además, este componente puede causar picores en la epidermis y ojos.

DBP

El ftalato de dibutilo (DBP) es una sustancia que suele ser encontrada en los productos para las uñas como disolventes, por ejemplo. Investigaciones realizadas sobre animales han demostrado que el DBP puede acarrear trastornos de desarrollo, alteraciones en los testículos o próstata y reducción de la cantidad de espermatozoides.

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