La disfagia es un signo de enfermedad subyacente del esófago o de los órganos vecinos del esófago, que puede ser debido a reflujo gastro-esofágico, lo que dificulta la ingesta de alimentos y conlleva otras complicaciones, una de estas es la aspiración. es común en personas con enfermedades neurológicas como accidentes cerebrales, Parkinson y demencia. Expertos en el tema dan consejos para tratar este mal, que generalmente se presenta en personas de la tercera edad.
Prevención durante la alimentación por la boca.
Descanso. A decir del gastoenterólogo, Ulises Gonzáles, lo importante es dejar que la persona descanse durante 30 minutos antes de la hora de alimentarla; si está descansada, es probable que la persona tenga menos dificultad para tragar.
Posición. El especialista también recomendó que la persona se siente erguida en una silla; si está confinada a la cama, eleve el respaldo a un ángulo de 90 grados.
Mirando hacia abajo. Si le inclina la cabeza ligeramente con el mentón hacia abajo, ayudará a reducir la aspiración.
El ritmo. Para Román Claure, geriatra, también es bueno graduar el ritmo de la alimentación y el tamaño de los bocados según la tolerancia de la persona; evite la alimentación apresurada o forzada. "Alterne bolos sólidos y líquidos".
Prevención durante la alimentación por sonda.
Posición. Según ambos especialistas, para estos pacientes que ingieren a través de sonda, se debe mantener el respaldo de la cama elevado al menos a 30º durante las alimentaciones continuas.
Consulte. Claure remarcó que es importante consultar al adulto mayor, si siente algún tipo de intolerancia a los alimentos que está ingiriendo. "Si tiene la posibilidad de hablar, que lo haga".
Cuidados orales. Los expertos indicaron que un buen número de personas de la tercera edad carece de dentaduras propias y la falta de higiene podría provocar una aspiración. Por tanto, se debe tener especial cuidado.
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