jueves, 30 de enero de 2014

Prolonga la lozanía de tu piel

El cuidado de la piel es fundamental para lucir un aspecto radiante. Recuerda que la piel es nuestra “fachada” y su apariencia puede decir mucho de nuestra salud. Para tener una piel suave y que luzca siempre joven es necesario brindarle la atención adecuada.

ELIGE EL PRODUCTO IDEAL SEGÚN EL TIPO DE PIEL

No es conveniente usar lociones limpiadoras o exfoliantes faciales con mucha cantidad de ácido, ya que éstas pueden resecar demasiado la piel. Elige con atención productos adecuados para tu tipo de piel o bien recurre a las soluciones naturales.

LAVARSE EL ROSTRO CON MIEL

La miel es un ingrediente natural muy efectivo para la belleza de la piel, así que en lugar de utilizar una loción limpiadora o agua y jabón especial para quitar las impurezas, toma un frasco de miel y aplica un poco de ella en el rostro. ¡Haz la prueba! Notarás que tu piel queda naturalmente limpia y suave.

ENJUAGAR EL ROSTRO CON AGUA FRÍA

Usa agua fría. La temperatura baja del agua no sólo es la adecuada para despabilarnos rápidamente, sino también para promover una mejor humectación en la piel y cerrar los poros. El agua caliente, de lo contrario, la vuelve más seca y escamosa.

SECARSE CON UNA TOALLA SUAVE

No frotes tu rostro de manera fuerte y brusca contra la toalla. Recuerda que la piel de la cara es muy sensible; tan solo acaricia tu piel con una palmadita en una toalla suave y deja que se seque naturalmente.

ACEITES VEGETALES

Otros ingredientes naturales fantásticos para tener una piel perfecta son los aceites vegetales, como el aceite de almendras, el aceite de coco, el aceite de oliva... Estos productos hidratan, limpian y suavizan la piel de manera inofensiva, natural y, por supuesto, económica. ¡Son de lo mejor!

BEBER JUGOS Y LICUADOS DE FRUTAS Y VERDURAS

Nada mejor para la piel y la salud en general que un suculento licuado de frutas y verduras repleto de nutrientes y antioxidantes. ¡Además, son deliciosos! Intenta beber algún licuado de frutas y verduras cada dos días. Una opción puede ser una mezcla de zumo de manzana, zanahoria y pimientos rojos.

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