Estrés en una edad crítica

Quien dice que los preadolescentes no tienen estrés. A esta edad, lo tienen todo resuelto, dicen los padres, ya que cuentan con techo, comida, educación y todo lo que necesitan. Sin embargo, el psiquiatra y especialista en medicina psicosomática Rafael Valdivieso Urquidi, indica que este cuadro es muy frecuente a esta edad. “No olvidemos que existen dificultades de adaptación ya que están sufriendo cambios”, explica el especialista.

Un enemigo oculto. Los cambios de esta edad pueden ser de ambiente, hormonales, familiares etc. “Todo esto obliga al niño a hacer una readaptación”. Esta situación no es nada fácil, si el niño no está preparado. “Empeora más si es que su entorno tampoco lo está”, advierte Valdivieso.

Síntomas. Cuando ellos sufren de este síndrome, explica Valdivieso, se vuelven rebeldes, irritables, hiperactivos. Si no se detecta a tiempo, los niños pueden adquirir malos hábitos, primero pueden ser alimenticios. Entre los que pueden estar abusar de los dulces, sodas, chicles, pastillas. Mientras van creciendo adquieren otro tipo de adicciones, resalta. Asimismo, los cambios de humor, la pérdida de energía, la tristeza, la dificultad para comunicarse. Ademas, que afecta en la relación en su colegio, ya que este estado puede perjudicar en sus relaciones con sus compañeros, no permitiéndole interactuar. "Si no es tratado como debe de ser, los chicos se pueden volver antisociales y en futuro fracasar en lo que se propongan”, explica el profesional

Falta de tónico. En muchos casos, los padres no detectan esta situación. “No solo basta con hablar, la solución depende de muchas cosas; tónicos, alimentos y falta vitaminas”. Además para afrontar este cuadro, tiene que haber un trabajo en conjunto, tanto de los padres, maestros y profesionales entendidos en el tema.